…cuando lo inicié, lo que tenía en mente aquel mayo del 2010 viendo la televisión aterrado por las malas noticias, era un simple pensamiento: «necesito dinero ya mismo», pero esa razón no fue suficiente para tener éxito, de hecho me llevó al fracaso.

Así que luego de tratar una y otra vez de hacer mucho dinero, hoy «con la cabeza fría» con el pasar de los años» puedo decirle que si usted necesita ingresos  «ahora mismo» o tener éxito en su negocio, debe dejar de pensar en tener un gran producto o servicio (Los cliente son los que dirán si es bueno o no su producto), enfóquese mejor en cómo hacer que la gente le compre, pero, sin que sienta que se muere por venderles. 

La idea que cambiará sus resultados finalmente se basa en dejar de vender y comenzar a entender cómo descubrir que le quieren comprar las personas y asociar eso a su producto o servicio para poder, esta es la técnica que podrá aprender en mi ebook Deja de vender, descubre como quieren comprarte.

¿Algo confuso el consejo anterior? 

Voy a desarrollar este importante punto, tómelo con calma. Este punto es la clave para entender, al finalizar la lectura, cómo cerrar ventas rápido sin hablar tanto a partir de hoy mismo.  

MUCHOS LE ESTÁN MINTIENDO SOBRE CÓMO CERRAR VENTAS

Si usted quiere hacer dinero cerrando ventas, lo obvio es salir corriendo a venderle al primero que se cruce en su camino, contactar a todo el mundo por las redes sociales o a la mayor cantidad de personas posible y ver si la ley del mayor esfuerzo lo encuentra a su favor, — eso pensé — al menos esto es lo que recomiendan los expertos. Ellos no hablan de la Ley del menor esfuerzo, por que supuestamente es para flojos. 

«Vender es simple matemática». — Eso decían todos los gerentes a los que les trabajé y he escuchado eso por un par de décadas. Pero un buen día día descubrí lo contrario. Más de esto, más adelante.

Volvamos al punto inicial. Quiere más dinero o simplemente necesita vender… pero su lógica lo lleva a intentar vender, pero solo encuentra frustración. 

Muchos lo rechazan. Muchos no le responden sus mensajes, o le dejan en visto los mensajes cuando envía un por Whatsapp. 

Pero, con quienes le prestan atención, termina hablando casi una hora sin darse cuenta, y siente que perdió su tiempo, pues lo perdió. 

Por otra parte, los que le dicen, «me interesa, déjeme pensarlo» o «lo consultaré», los ve desaparecer como por arte de magia y es cuando llega la maldita frustración. 

Y lo anterior se repite una y otra vez, sin poder salir de esa trampa. No por un día, mes o años, sino hasta décadas.

¿Cómo se todo lo anterior? porque fue exactamente lo que me pasó a mi durante 5 largos años. 

No era tan listo cómo usted. Es decir, no creo que vea normal intentar año tras año que algo cambie si no produce resultados, pero a pesar de eso yo insistía pensando que algo iba a cambiar. No fue así. 🙁

Después de toda esa pérdida de tiempo mi pensamiento final fue, «no soy tan listo, pero puedo conseguir quien si; alguien tiene la información que me hace falta para cambiarlo todo».

CUANDO CAMBIA LA INTENSIÓN, CAMBIA LA DIRECCIÓN Y CON  ELLO, LOS RESULTADOS

De pronto, casi en el quinto año de mi fracaso empresarial, un oscuro y frío 15 de diciembre del 2014, mientras las empresas enviaban a sus empleados de vacaciones por temporada de navidad dejándome sin posibilidades de poder venderles…

…decidí renuente, reunirme por primera vez con un editor de un periódico reconocido. Lo recuerdo bien, por que pague el café y la consulta más cara hasta ese momento, jejejeje. 

Lo que sucedió en esa reunión me hizo entender que mi mensaje estaba basado en la idea clásica de vender, centrada en el producto y no en la idea de hacer que la gente compre…